Hasta ahora, se sabía que los hemisferios derecho e
izquierdo del cerebro procesan el sonido de forma diferente, pero esto
era atribuido a propiedades de las células cerebrales.
Un estudio publicado en la revista Science demuestra que el oído
izquierdo amplifica mejor los tonos musicales, y el derecho, los sonidos
del habla.
Investigadores de las universidades de California y Arizona, Estados
Unidos, llegaron a esta conclusión luego de analizar el proceso
de la audición en más de 3.000 recién nacidos en
Los Angeles, todos con el aparato auditivo en perfectas condiciones.
El estudio fue dirigido por Yvonne Sininger, de la escuela de medicina
David Gefflen de la Universidad de California, y financiado por el Instituto
Nacional sobre Sordera y Otros Desordenes Comunicativos.
Sininger concluyó: "Desde el nacimiento, el oído
es estructurado para distinguir entre distintos tipos de sonidos y enviarlos
al mejor lado del cerebro para su procesamiento." Hasta ayer, los
médicos pensaban que los oídos izquierdos y derechos funcionaban
exactamente igual. Sininger dijo que "por eso pensábamos
que daba lo mismo saber cuál era el oído dañado
de una persona; ahora vemos que esto puede tener gran implicancia para
el habla y el desarrollo del lenguaje".
Ya había sido demostrado que las regiones auditivas de las dos
mitades del cerebro clasifican los sonidos de manera diferente. El lado
derecho se especializa en descifrar el discurso hablado y las señales
sonoras que cambian rápidamente, mientras que el lado izquierdo
lidera el proceso de tonos y música.
Sininger y su equipo estudiaron los pequeños amplificadores
que se encuentran en las células ciliares externas del oído
interno. Estas células son las encargadas de transmitir las vibraciones
mediante movimientos de contracción y expansión. A través
de la coclea —el hueso con forma de espiral—, las envían
al cerebro, donde estas vibraciones son decodificadas.
El estudio, de seis años de duración, se hizo insertando
en los bebés sondas que transmitían distintos tipos de
sonidos, capaces también de medir las vibraciones y amplificarlas.
"Estas vibraciones amplificadas se filtran en un fenómeno
llamado emisión otoacústica (la sigla en inglés
es OAE)", dijo Sininger.
"Medimos la OAE insertando un micrófono en cada canal",
aclaró.
Utilizaron dos tipos de sonido: primero, clicks rápidos, que
emulan la velocidad de los cambios sonoros que se dan en el habla, y
segundo, tonos sostenidos. Así descubrieron que el oído
izquierdo amplifica mejor los tonos de tipo musical mientras que el
oído derecho hace lo mismo con otro tipo de sonido (un "click").
¿Por qué sucede? No lo saben. No descubrieron diferencias
anatómicas entre los oídos. Barbara Cone-Wesson, de la
Universidad de Arizona, dijo que este hallazgo puede influenciar en
los implantes o en el diseño de los aparatos, según sea
para escuchar música o conversar.