El hospital de Montilla ha puesto en marcha el programa de detección
precoz de la hipoacusia en los niños recién nacidos, con
lo que se posibilita un mejor tratamiento de este problema.
La hipoacusia o pérdida de la capacidad auditiva es un problema
que puede presentar cualquier niño en el momento de nacer y se
calcula que en España cinco de cada 1.000 recién nacidos
pueden padecerla en mayor o menor grado. Hay algunos condicionamientos
que predisponen a la sordera, como el nacimiento prematuro o el bajo
peso al nacer. En estos niños es mayor el riesgo de hipoacusia,
presentándola en mayor o menor grado dos de cada 100 nacidos.
Se puede detectar la falta de audición desde los primeros días
de vida con una sencilla prueba que consiste en la detección
de otoemisiones acústicas, que son unos sonidos que produce el
oído cuando funciona normalmente.