Hasta
hace unos años se pensaba que las hipoacusias del oído interno eran
idopáticas, pero después de diversas investigaciones José Ramón García
Berrocal, del Servicio de ORL de la Clínica Puerta de Hierro, de Madrid,
ha constatado que las hipoacusias inmunomoduladas del oído interno se
pueden tratar y el paciente puede recuperar su función auditiva. Detectarlas
de forma precoz es uno de sus retos.
Desde hace unos años, la patología del oído interno era intocable y
muchas alteraciones en dicha zona del órgano auditivo no tenían solución.
Con la aparición de los implantes cocleares se rompió esta percepción
y se empezó a estudiar el oído interno y sus alteraciones. Uno de los
inconvenientes con los que se encontraron los especialistas es que el
oído interno no es susceptible de estudios biópsicos directos, "porque
implicaría la disfunción y la pérdida irreversible de su función", ha
explicado a DM José Ramón García Berrocal, adjunto del Servicio de Otorrinolaringología
de la Clínica Puerta de Hierro, de Madrid, y autor del libro Enfermedad
inmunomediada del oído interno.
La patología inmunomediada del oído interno se ha ido considerando
cada vez más y se ha conseguido que parte de las enfermedades no sean
caracterizadas como idiopáticas, sino que pueden ser autoinmunes o genéticas.
También, "en los últimos años se ha visto la posibilidad de reversión
de esta patología con tratamiento médico y es un punto a tener en cuenta
para establecer el diagnóstico de forma precoz", ha indicado García.
Todas las hipoacusias inmunomediadas son susceptibles de tratamiento.
"El remedio clásico es con corticoides, pero se han ido incorporando
algunos inmunosupresores, que se emplean en los casos de mal pronóstico
y cuando existe mucha fluctuación en la hipoacusia".
En el Servicio de Otorrinolaringología de la Clínica Puerta de Hierro,
de Madrid, se están diseñando dispositivos para dispensar de forma directa,
a través del oído medio, la medicación necesaria para las hipoacusias
del oído interno. "Es un campo aún experimental en el que se está trabajando".
Detección precoz
Para García Berrocal, el reto es establecer el diagnóstico de la enfermedad
inmunomodulada primaria, la que no está asociada a una enfermedad autoinmune
sistémica. Es cierto que "en ocasiones, gracias al protocolo que tenemos
sobre diagnóstico, hemos llegado a detectar enfermedades autoinmunes
sistémicas porque han debutado con una pérdida brusca de audición".
Se trata de un amplio campo de estudio, puesto que es de una de las
escasas formas de pérdida neurosensorial reversible que se pueden resolver
con tratamiento médico.
El experto se lamenta de que aún no han encontrado un marcador específico
y existen diferentes antígenos a los que se ha intentado atribuir un
papel primordial en la enfermedad, pero quedan por determinar muchos
aspectos.
Para detectar las hipoacusias inmunomediadas, es necesario hacer un
buen perfil. En función de la positividad o no de anticuerpos antinucleares,
del déficit de poblaciones de linfocitos T y del aumento de poblaciones
de memoria, que indican una activación del sistema inmune, junto a una
buena respuesta al tratamiento de la hipoacusia bilateral se puede establecer
si realmente existe una alteración de la audición en el oído interno.
Una vez que hemos sospechado la causa autoinmune, el internista valora
al enfermo para descartar una afectación sistémica.
García ha recordado que la hipoacusia inmunomediada debuta entre los
40 y los 43 años de edad.
Información básica
El libro Enfermedad inmunomediada del oído interno recoge los aspectos
más novedosos de esta patología que lleva estudiando durante más de
diez años el Grupo de Investigación Otológica de la Clínica Puerta de
Hierro, de Madrid. Escrito por José Ramón García Berrocal, es el primer
intento de sistematizar un tema de gran interés.
Conocer la enfermedad inmunomediada del oído interno supone la posibilidad
de interferir en su evolución, deteniendo la progresión e incluso mejorando
el estado del órgano afectado mediante el uso de fármacos antiinflamatorios.
Rafael Ramírez Camacho, del Servicio de Otorrinolaringología de la
Clínica Puerta de Hierro, ha destacado en la presentación del libro
que las sorderas inmunomediadas suponen el 4 por ciento de la investigación
en ORL a nivel mundial. El nuevo texto, que ha contado con el patrocinio
de la compañía Solvay, incluye todas las implicaciones inmunológicas
que tienen las enfermedades del oído interno y explica los puntos claves
para obtener un diagnóstico correcto y precoz.
Clínica
Puerta de Hierro