
Aunque
se desconoce el número exacto de personas que sufren algún
tipo de discapacidad auditiva en todo el mundo, este problema va en aumento
sobre todo en los países más desarrollados. Muchas veces
es consecuencia del estilo de vida cotidiano que llevamos en el que el
exceso de ruido se convierte en premisa común e ineludible.
Según el estudio estimativo desarrollado por Adrain Davis del
British MRC Institute of Hearing Research el número
de personas que en 1995 sufría algún tipo de pérdida
auditiva ascendía a un total mundial de 440 millones. De esta
cifra, 70 millones se registraban en Europa sobre una población
total de 700 millones de habitantes, mientras que en EE.UU el número
de personas con sordera ascendía a los 25 millones de afectados.
Por desgracia, las cifras estimadas para los años venideros
no resultan precisamente halagüeñas: el problema va en aumento
con especial incidencia en los países desarrollados. Así,
según datos de Davis, para 2005 habrá en el mundo un total
de 560 millones de personas con problemas de audición; de estos,
80 millones se registrarán en Europa; en EE.UU y Canadá
se alcanzará la cifra de 30 millones de afectados. En los países
en vías de desarrollo el número será dos veces
mayor.
Tampoco parece que la situación vaya a mejorar a medio plazo,
ya que según los mismos estudios estimativos más de 700
millones de habitantes de todo el mundo padecerán sordera de
más de 25 dB en 2015, una cifra que se prevé aumente en
dos millones como mínimo para 2025.