Tres jóvenes sordas viajan a Perú, pero
de vacaciones; han decidido emplear su tiempo libre para ayudar
a niños y niñas sordos en un programa de voluntariado.
Yolanda, Chabeli y Leticia llevan preparando su “especial vacaciones” desde
hace casi un año. Primero participaron en el curso Ciclo de
Educación para el Desarrollo, organizado por SETEM (Servicio
al Tercer Mundo), durante los meses de noviembre y diciembre.
Esta es una primera fase donde se aprenden los conocimientos básicos
que se necesitan para ejercer el voluntariado. Pasada lo cual, hay
un proceso de selección. Se realizan entrevistas personales
para seleccionar a las personas que hayan alcanzado el nivel necesario.
A partir de aquí ya se entra en una segunda fase, propiamente
de preparación del proyecto de trabajo, buscando la zona adecuada
donde trabajar en temas relacionados con la educación de niños/as
sordos/as.
Mantienen contacto con dos responsables, una del centro CTRCA, en Perú,
y la coordinadora del programa aquí. Siguiendo las indicaciones
de ambas van preparando su itinerario y proyecto de trabajo a realizar
durante el mes que estarán en el lugar elegido.
El tercer escalón ya es solo para realizar los últimos
preparativos, ultimar contactos y realizar las gestiones necesarias
para el desplazamiento y la estancia en el lugar elegido.