El alcalde de Roma, Walter Veltroni, inauguró la semana pasada
el primer restaurante específicamente orientado a clientes sordos
en Italia. Los camareros en el restaurante Ciak Si Manga saben perfectamente
cómo recibir pedidos en lengua de signos italiana (LIS), así
que las personas sordas que acuden a almorzar o cenar no tienen que
preocuparse por llevar a algún amigo oyente que les sirva de
intérprete. “Va a ser un lugar para aquellos que se encuentran
problemas para comunicarse, pero que tienen mucho que decir”,
comentó el alcalde durante la inauguración.
El dueño del restaurante, Andrea Migliotto, sabe que su establecimiento
es el segundo de toda Europa en ofrecer este servicio a sus comensales
(40 en total), y que algo que puede parecer tan simple como pedir un
filete muy hecho o un plato de pasta al dente puede resultar dificultoso
para una persona sorda.
Además de unos platos de gran calidad, el restaurante ofrece
un equipamiento que permite a las personas sordas comunicarse por ordenador
para enviar emails o chatear en Internet. Los comensales también
pueden ver películas subtituladas sobre una gran pantalla mientras
disfrutan de las delicias gastronómicas.
Las personas oyentes también son bienvenidas: uno de los ordenadores
tiene incluso un programa para aprender lengua de signos. Durante la
inauguración del restaurante se presentó además
al primer diccionario ilustrado de lengua de signos italiana.
“Esta es una gran oportunidad para la ciudad de Roma, que siempre
ha mostrado su solidaridad con la defensa de los derechos humanos. Un
lugar como este es de gran importancia para reunir una gama de posibilidades
culturales y de comunicación”, alabó el alcalde.
Las asociaciones de personas sordas han apoyado esta iniciativa: “Hay
unas 4.500 personas sordas en Roma”, ha comentado Laura Santarelli,
vicepresidenta de la Academia Sorda Europea e intérprete de lengua
de signos en las noticias de televisión; “esta empresa
es un desafío sin precedentes, que servirá para extender
la cultura sorda y acelerar el proceso de reconocimiento de la lengua
de signos italiana”.